Ir al contenido

¿LO DISEÑÓ ALGUIEN?

La pegajosa baba de la babosa

La pegajosa baba de la babosa

 Desde hace tiempo, se están buscando nuevos pegamentos que los cirujanos puedan usar en sus operaciones y para reparar tejidos dañados. Muchos de los pegamentos que se usan hoy no se pueden aplicar en el interior del cuerpo, pues son tóxicos, se endurecen demasiado cuando se secan y no se adhieren a los tejidos húmedos. Pero, al estudiar la baba de la babosa, a los científicos han encontrado una solución.

 Piense en lo siguiente: Cuando la babosa se siente amenazada, produce una baba tan pegajosa que le permite adherirse incluso a una hoja mojada. Este mecanismo de defensa la protege sin dejarla completamente inmóvil.

 Los investigadores han estudiado esa baba y han descubierto por qué es un pegamento natural tan poderoso. Entre otras cosas, se vale de uniones químicas y de la atracción electrostática. Penetra en la superficie a la que se adhiere la babosa y, sometida a presión, es muy elástica. Tratando de imitar la baba de la babosa, los científicos han creado un pegamento que es mucho más fuerte que los adhesivos médicos que se están usando ahora. Este pegamento es capaz de adherirse a nuestros órganos. Se dice que se adhiere a los órganos igual de bien que el cartílago al hueso.

 Los expertos creen que este nuevo pegamento podría llegar a ser un material básico de cirugía. Ya no harían falta ni grapas ni puntos de sutura. Y podría usarse tanto para reparar el cartílago como para colocar un dispositivo médico en un punto exacto del cuerpo. Además, ya se ha probado con éxito para sellar agujeros en hígados de rata y en el corazón de un cerdo.

 Los científicos a menudo encuentran soluciones elegantes a problemas comunes estudiando la naturaleza. Donald Ingber, director del instituto que desarrolló este adhesivo sintético, explica: “Es cuestión de saber dónde mirar y reconocer una buena idea cuando la ves”.

 ¿Qué le parece? ¿Surgió por sí solo el pegamento natural de la babosa, o lo diseñó alguien?

a Su nombre científico es Arion subfuscus.