Ir al contenido

¿Cómo debo orar? ¿Es el padrenuestro la mejor forma de hacerlo?

¿Cómo debo orar? ¿Es el padrenuestro la mejor forma de hacerlo?

La respuesta que da la Biblia

 Jesús enseñó el padrenuestro porque sus discípulos le pidieron: “Señor, enséñanos a orar” (Lucas 11:1). Así que el padrenuestro sirve de guía para saber sobre qué cosas podemos orar y cómo debemos hacerlo. Ahora bien, el padrenuestro, o la oración del Señor, no es la única oración que Dios escucha. a Más bien, es un ejemplo del tipo de oraciones que le gustan a Dios.

En este artículo veremos lo siguiente:

 ¿Cuál es la oración del padrenuestro?

 El padrenuestro aparece en Mateo 6:9-13. Las palabras pueden cambiar dependiendo de la traducción de la Biblia. Estos son solo dos ejemplos:

 Traducción del Nuevo Mundo: “Padre nuestro que estás en los cielos, que tu nombre sea santificado. Que venga tu Reino. Que se haga tu voluntad, como en el cielo, también en la tierra. Danos hoy nuestro pan para este día; perdónanos nuestras deudas, como nosotros también hemos perdonado a nuestros deudores. Y no nos dejes caer en la tentación, sino líbranos del Maligno”.

 La Sagrada Biblia de América: “Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu Reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal”. b

 ¿Qué significa lo que dice el padrenuestro?

 Las enseñanzas de Jesús siempre están de acuerdo con lo que dice la Biblia, así que es lógico que sea la propia Biblia la que nos ayude a entender el padrenuestro.

“Padre nuestro que estás en los cielos”

 Como Dios nos creó y nos dio la vida, es apropiado que lo llamemos “nuestro Padre” (Isaías 64:8).

“Que tu nombre sea santificado”

 El nombre de Dios es Jehová. Como ese nombre es santo o sagrado, debemos honrarlo y santificarlo. Esto lo hacemos cuando les hablamos a otros de la personalidad de Dios y de su propósito (Salmo 83:18; Isaías 6:3).

“Que venga tu Reino”

 El Reino de Dios es un gobierno que está en el cielo, y su Rey es Jesús. Jesús nos enseñó a pedir que este Reino gobierne la Tierra (Daniel 2:44; Apocalipsis 11:15).

“Que se haga tu voluntad, como en el cielo, también en la tierra”

 En el cielo no existe la maldad ni la muerte. Dios quiere lo mismo para la Tierra: que los seres humanos vivamos para siempre en paz y seguridad (Salmo 37:11, 29).

“Danos hoy nuestro pan para este día”

 En tiempos de Jesús, el pan era un alimento básico. Estas palabras nos recuerdan que dependemos de que nuestro Creador nos dé las cosas necesarias para vivir (Hechos 17:24, 25).

“Perdónanos nuestras deudas, como nosotros también hemos perdonado a nuestros deudores”

 En este contexto, la palabra “deudas” es lo mismo que “pecados” (Lucas 11:4). Todas las personas pecamos y necesitamos que se nos perdone. Pero, si queremos que Dios nos perdone, nosotros tenemos que perdonar a los demás (Mateo 6:14, 15).

“No nos dejes caer en la tentación, sino líbranos del Maligno”

 Jehová nunca nos tienta para que hagamos algo malo (Santiago 1:13). Pero Satanás, el Diablo —el “Maligno”— sí nos tienta; por eso también se le llama “el Tentador” (1 Juan 5:19; Mateo 4:1-4). Al decir esto, le pedimos a Jehová que no nos deje ceder ante la tentación y desobedecerlo.

 ¿Es necesario que repita el padrenuestro cada vez que oro?

 La intención de Jesús era que la oración del padrenuestro sirviera de ejemplo, no que se repitiera palabra por palabra. Justo antes de pronunciar el padrenuestro, Jesús advirtió: “Cuando ores, no repitas lo mismo una y otra vez” (Mateo 6:7). De hecho, usó palabras diferentes cuando enseñó a orar en otra ocasión (Lucas 11:2-4).

 La mejor forma de orar es hablándole a Dios desde el corazón y contándole lo que pensamos y sentimos (Salmo 62:8).

 ¿Cómo debo orar?

 El padrenuestro es un buen ejemplo de la clase de oraciones que Dios escucha. Fíjese en cómo otros textos de la Biblia concuerdan con lo que dice esta oración.

  •   Solo se debe orar a Dios

     Texto: “En cualquier situación, mediante oraciones y ruegos y dando gracias, háganle saber a Dios sus peticiones” (Filipenses 4:6).

     Significado: Al empezar diciendo “Padre nuestro”, esta oración nos enseña que solo debemos orarle a Jehová Dios, no a Jesús, ni a María, ni a los santos.

  •   Hay que orar por cosas que estén de acuerdo con la voluntad de Dios

     Texto: “Le podemos pedir cualquier cosa que esté de acuerdo con su voluntad y él nos escucha” (1 Juan 5:14).

     Significado: Al decir “que se haga tu voluntad”, Jesucristo destacó la importancia que debería tener la voluntad de Dios en nuestra vida. Por eso, al orarle a Dios, mencionamos aquellas cosas que están de acuerdo con su voluntad. Para saber lo que Dios quiere para la Tierra y los seres humanos, hay que estudiar la Biblia.

  •   Se pueden incluir asuntos personales

     Texto: “Arroja tu carga sobre Jehová, y él te sostendrá” (Salmo 55:22).

     Significado: Como a Dios le preocupan nuestros asuntos, en el padrenuestro Jesús incluyó peticiones más personales. Del mismo modo, podemos pedirle a Dios que cubra nuestras necesidades en sentido físico, que nos dé guía para tomar decisiones importantes, que nos dé su apoyo en los momentos difíciles y que nos perdone nuestros pecados. c

a Por ejemplo, Jesús y sus discípulos hicieron otras oraciones en las que no usaron las mismas palabras del padrenuestro (Lucas 23:34; Filipenses 1:9).

b Algunas Biblias, como la versión Reina-Valera, terminan la oración del padrenuestro con lo que se conoce como una doxología (una expresión de alabanza a Dios): “Porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén”. El Comentario Bíblico “San Jerónimo” afirma: “En los manuscritos más dignos de confianza no aparece la doxología”.

c Algunas personas creen que necesitan el perdón de Dios, pero quizás se sienten demasiado culpables para orar. Sin embargo, Jehová les pide: “Arreglemos las cosas entre nosotros” (Isaías 1:18). Él nunca les dará la espalda a quienes buscan su perdón con sinceridad.